¿Y por dónde empiezo con esto de la mosca?
Tengo que reconocer que cuando empecé a pescar a mosca, tuve la suerte de contar con estupendos profesores, que además pronto se convirtieron en muy buenos amigos, y con ellos aprendí todo lo necesario para poder entrar en el río con un mínimo de conocimiento sobre lo que tenía que hacer, pero creo que para mucha gente que puede estar interesada en acercarse al mundo de la pesca a mosca, es difícil saber ciertas cosas básicas, referentes al equipo, los gadgets, las moscas y los ríos dónde poder pescar. Existe tanta información sobre la pesca a mosca, sobre el lanzado, sobre los tipos de moscas, sobre los tipos de cañas, sobre los equipos de pesca; que para alguien que empieza, puede parecer una empresa inabarcable. Por eso creo que sería útil comenzar este blog pensando en aquellos que sienten curiosidad por este mundo, pero están llenos de dudas sobre lo que tienen que hacer, y por eso vamos a empezar por “los básicos” de la pesca a mosca.
Sin querer ser adalides de nada, creo que una de las principales características del pescador a mosca seca es el respeto por el entorno en el que desarrolla su afición.
Todo el que se acerque al río debe ser consciente de que está en un entorno privilegiado que en ese momento está compartiendo con sus otros habitantes. Con un poco de suerte y algo de observación, enseguida verá que no está solo, sino rodeado de aves, mamíferos, reptiles, anfibios e invertebrados de muchos tipos, que junto con los peces, conforman el ecosistema donde ahora llega el pescador. Aprender a disfrutar del entorno que le rodea, es la primera lección de un pescador y en mi opinión nadie debería ir más adelante sin tenerla bien aprendida, empezando por su primer y principal capítulo, que es devolver siempre las capturas al río y tratarlas con cuidado extremo mientras están en nuestras manos.
Todo el que se acerque al río debe ser consciente de que está en un entorno privilegiado que en ese momento está compartiendo con sus otros habitantes. Con un poco de suerte y algo de observación, enseguida verá que no está solo, sino rodeado de aves, mamíferos, reptiles, anfibios e invertebrados de muchos tipos, que junto con los peces, conforman el ecosistema donde ahora llega el pescador. Aprender a disfrutar del entorno que le rodea, es la primera lección de un pescador y en mi opinión nadie debería ir más adelante sin tenerla bien aprendida, empezando por su primer y principal capítulo, que es devolver siempre las capturas al río y tratarlas con cuidado extremo mientras están en nuestras manos.
Los peces: truchas, reos, salvelinos, salmones…
En principio, casi todas las especies de nuestros ríos son pescables a mosca, pero hay que reconocer que los salmónidos son los reyes de esta afición.
Los salmónidos, se distinguen claramente del resto de los peces de nuestros ríos por la aleta adiposa, que se encuentra en la parte superior del pez justo antes de la cola, (Hasta la introducción de los siluros en España en 1974, que también tienen aleta adiposa, esta era la única familia de peces con esta aleta en la Península Ibérica).
Los salmónidos, se distinguen claramente del resto de los peces de nuestros ríos por la aleta adiposa, que se encuentra en la parte superior del pez justo antes de la cola, (Hasta la introducción de los siluros en España en 1974, que también tienen aleta adiposa, esta era la única familia de peces con esta aleta en la Península Ibérica).
En España los salmónidos que hay son dos especies autóctonas, salmón y trucha común y tres introducidas, trucha arco iris, salvelino y hucho.
Trucha común:
Salmo trutta (con dos subespecies, trucha común y reo)
Salmo trutta fario es la trucha común de nuestros ríos, distribuida por casi toda la Península en las cabeceras de los ríos: aguas rápidas, frías y oxigenadas.
Salmo trutta trutta es el llamado Reo, se trata de una subespecie atlántica que migra al mar, como el salmón, regresando al río para reproducirse.
Salmo trutta (con dos subespecies, trucha común y reo)
Salmo trutta fario es la trucha común de nuestros ríos, distribuida por casi toda la Península en las cabeceras de los ríos: aguas rápidas, frías y oxigenadas.
Salmo trutta trutta es el llamado Reo, se trata de una subespecie atlántica que migra al mar, como el salmón, regresando al río para reproducirse.
Trucha arco iris:
Oncorhynchus mykiss. Antes llamada Salmo gairdneri, es originaria de América del Norte y se introdujo en España en el siglo XIX. Convive con la trucha autóctona y se usa para repoblar ríos con fines de pesca deportiva. No es igual de apreciada por el pescador porque normalmente procede de piscifactorías.
Oncorhynchus mykiss. Antes llamada Salmo gairdneri, es originaria de América del Norte y se introdujo en España en el siglo XIX. Convive con la trucha autóctona y se usa para repoblar ríos con fines de pesca deportiva. No es igual de apreciada por el pescador porque normalmente procede de piscifactorías.
Salmón:
Salmo salar. El salmón y el Reo viven en el mar pero suben al río donde nacieron para reproducirse. Esto se llama en biología comportamiento Anádromo. En la Península Ibérica se puede encontrar en Galicia, Asturias, Cantabria y Pais Vasco.
Salmo salar. El salmón y el Reo viven en el mar pero suben al río donde nacieron para reproducirse. Esto se llama en biología comportamiento Anádromo. En la Península Ibérica se puede encontrar en Galicia, Asturias, Cantabria y Pais Vasco.
Salvelino:
Salvelinus fontinalis Procede también de Norteamérica y al igual que la trucha arco iris se introdujo en España en el siglo XIX. Vive en lagos y cabeceras de ríos de montaña. Su pesca es más habitual en los Pirineos.
Salvelinus fontinalis Procede también de Norteamérica y al igual que la trucha arco iris se introdujo en España en el siglo XIX. Vive en lagos y cabeceras de ríos de montaña. Su pesca es más habitual en los Pirineos.
Hucho:
Hucho hucho Se introdujo en 1968 y sólo ha sobrevivido en el Tormes. Es el llamado salmón del Danubio, pero no es migratorio. Crece mucho y al cabo de cinco años puede medir más de medio metro.
Hucho hucho Se introdujo en 1968 y sólo ha sobrevivido en el Tormes. Es el llamado salmón del Danubio, pero no es migratorio. Crece mucho y al cabo de cinco años puede medir más de medio metro.
¿Qué comen los salmónidos?
Los salmónidos son depredadores omnívoros oportunistas, es decir que comen de todo lo que hay a mano, pero en estado salvaje se alimentan de invertebrados (principalmente de larvas, ninfas, subimagos e imagos de insectos), otros peces de su misma especie o de otras y pequeños anfibios y mamíferos.
En otro post hablaremos de los tipos de insectos que viven alrededor del río y su importancia en la alimentación de los salmónidos, principalmente en la de las truchas, ya que estos insectos son la base de la pesca a mosca.
En otro post hablaremos de los tipos de insectos que viven alrededor del río y su importancia en la alimentación de los salmónidos, principalmente en la de las truchas, ya que estos insectos son la base de la pesca a mosca.
¿Cuándo se reproducen y cómo?
La reproducción de los peces se llama freza. En biología existen dos estrategias reproductivas, llamadas de la r y de la K, en pocas palabras, los de la r son los que tienen mucha descendencia pero no tienen cuidado de ella y los de la K son los que tienen poca descendencia pero sí la cuidan. La estrategia K, en general, es típica de aves y mamíferos.
Los salmónidos frezan en aguas frías y muy oxigenadas, la hembra, cortejada por varios machos,suele hacer una cama en la grava del río y el macho los fertiliza. En youtube encontraréis muchos videos de truchas frezando, pero he seleccionado este que me ha gustado porque se ve muy bien todo el proceso
Los salmónidos frezan en aguas frías y muy oxigenadas, la hembra, cortejada por varios machos,suele hacer una cama en la grava del río y el macho los fertiliza. En youtube encontraréis muchos videos de truchas frezando, pero he seleccionado este que me ha gustado porque se ve muy bien todo el proceso
Cuanto más grande es la hembra más huevos pone y de mejor calidad. Es importante destacar esto, ya que aunque siempre deben devolverse al río las capturas si queremos mantener nuestras poblaciones de truchas, en particular es una barbaridad llevarse del río una hembra grande de trucha.
¿Qué hay que saber para manipular correctamente una captura?
1. Prolongar la pelea innecesariamente, sobre todo en época estival, sólo conduce a la muerte del animal. Aunque lo soltemos vivo morirá poco después. A más temperatura menos oxígeno en el agua, lo que hace que para seguir luchando el organismo del pez tenga que producir energía en condiciones anaeróbicas (es como los humanos y las agujetas producidas por el ácido láctico, sólo que al pez esto acaba matándole. Pescar cuando el agua está a más de 20ºC es como matar el pez).
2. Los peces segregan una sustancia mucilaginosa que protege su cuerpo, entre otras cosas contra parásitos, por eso nunca debemos tocar una trucha con las manos secas, porque destruiremos esa capa y pondremos en peligro la supervivencia de la trucha. Hay que mojar las manos con agua del río antes de tomarla de la sacadera.
3. La sacadera sin nudos: La red de una sacadera no debe llevar nudos, porque dañan la película mucilaginosa de la que hemos hablado antes. En la actualidad existen modelos sin nudos asequibles a todos los bolsillos.
4. La foto: si tenemos la suerte de capturar un buen ejemplar, debemos ser cuidadosos al sujetarlo, pues si lo apretamos mucho donde no debemos, las lesiones internas que le produciremos también lo llevarán a la muerte.
Os recomiendo la lectura del excelente post “truchas agonizando para obtener una buena foto”
5. Reanimar el pez antes de soltarlo: No se debe soltar un pez de cualquier manera después de una captura. No se dónde leí que el efecto de sacar el pez del agua después de una larga pelea es como si a alguien que corre los cien metros lisos le meten la cabeza en un cubo de agua nada más acabar la carrera. Al pez hay que meterlo en el agua y no soltarlo hasta que se encuentra con fuerzas para nadar. El mismo permanecerá dócilmente en nuestras manos hasta que se vea con fuerza.
3. La sacadera sin nudos: La red de una sacadera no debe llevar nudos, porque dañan la película mucilaginosa de la que hemos hablado antes. En la actualidad existen modelos sin nudos asequibles a todos los bolsillos.
4. La foto: si tenemos la suerte de capturar un buen ejemplar, debemos ser cuidadosos al sujetarlo, pues si lo apretamos mucho donde no debemos, las lesiones internas que le produciremos también lo llevarán a la muerte.
Os recomiendo la lectura del excelente post “truchas agonizando para obtener una buena foto”
5. Reanimar el pez antes de soltarlo: No se debe soltar un pez de cualquier manera después de una captura. No se dónde leí que el efecto de sacar el pez del agua después de una larga pelea es como si a alguien que corre los cien metros lisos le meten la cabeza en un cubo de agua nada más acabar la carrera. Al pez hay que meterlo en el agua y no soltarlo hasta que se encuentra con fuerzas para nadar. El mismo permanecerá dócilmente en nuestras manos hasta que se vea con fuerza.
¿Nos ven, nos oyen, nos sienten?
Los peces ven de una manera un tanto especial: al estar en medio acuático tienen una visión de lo que está fuera del agua, por encima de ellos, en un cono de unos 100º que se llama la ventana de visión. Todo lo que está más allá no lo ven y en su lugar lo que ven es el reflejo del fondo del río, si el agua está tranquila. En el agua tienen una visión periférica de unos 180ª y una pequeña ventana frontal binocular de unos 30 º, más amplia en los depredadores que en los peces presa.
En estos dos esquemas hechos por mi (perdón por los dibujos tan malos) intento mostrar la forma en que ven los peces.
En estos dos esquemas hechos por mi (perdón por los dibujos tan malos) intento mostrar la forma en que ven los peces.
Los peces oyen, en general muy bien, ya que el agua es un excelente transmisor del sonido y además son capaces de sentirnos, sobre todo si formamos ondas en el agua al andar, ya que tienen un órgano llamado línea lateral que detecta pequeños cambios de presión debidos a los movimientos del agua. Este órgano les sirve para poder orientarse en aguas totalmente turbias y para poder detectar movimientos a su alrededor para, por ejemplo, poder cazar o poder huir.
Así que al entrar en el río debemos hacerlo sin movimientos bruscos, sin chapoteos ni oleajes y a pez visto intentar no entrar nunca en su área de visión permaneciendo en su campo ciego.
Así que al entrar en el río debemos hacerlo sin movimientos bruscos, sin chapoteos ni oleajes y a pez visto intentar no entrar nunca en su área de visión permaneciendo en su campo ciego.
Bueno, pues por ahora es suficiente, en el próximo post hablaremos sobre
El equipo: caña, carrete, vadeador, botas, los gadgest…
Hasta pronto.
El equipo: caña, carrete, vadeador, botas, los gadgest…
Hasta pronto.